lunes, 20 de mayo de 2013

EL PADRE


Quisiera poder lavar el rostro de mi padre,
coger algodón del polvo de la tierra
pasarlo por su cara, que sus rizos laman
su piel antes de morir.
Quisiera estar dentro de él, como una vez estuve,
galopando en sus testículos el día antes de ser lanzada:
le es fácil llevarme entre sus largas piernas
cuesta arriba en San Francisco en tiempos de guerra,
soy su carne, ahí pertenezco,
puede amarme sin reserva,
su placer seré.
Quiero sentir, en el roce de la tela,
el contorno de su piel marcada,
quiero lavarlo, como restregaba
los rostros de mis muñecas a fondo
antes de cualquier ceremonia.


Sharon Olds.
EL PADRE.

pues SÍ...yoexistotúexistesélexiste


martes, 7 de mayo de 2013

AHORA SÍ QUE SE DERRAMA EL CIELO

Adrián RUMANIA vende revistas y pide dinero en la calle 
Me mira 
Me persigue
Sé lo que necesita
Me dice que me paga si voy con él 
Sé lo que necesita 
Me permites que alivie tu soledad???
Me pregunta si duermo en Cáritas 
Me abraza y me acaricia 
Vamos a un parque le sobo la polla me besa me aprieta y se corre 
Me marcho él me dice que me espera allí otro día 
He sacado a pasear mi estrella andrajosa 
Llueve truena y  llueve y truena y llueve llueve  sobre mi estrella  y huelo igual que un perro abandonado 

FRAGMENTO DE EZRA POUND, Cantos LXX



Lo que amas permanece,
el resto no es nada.
Lo que amas no te será arrebatado.
Lo que amas es tu herencia verdadera.
¿De quién este mundo, mío, de ellos,
o de nadie?
Primero vino lo visible, entonces lo palpable,
el Elíseo, da igual que fuera ante las puertas del Infierno.
Lo que amas es tu herencia verdadera.
Lo que amas no te será arrebatado.
La hormiga es un centauro en su mundo de dragón.
Humilla tu vanidad, no fue el hombre
quien hizo el valor, el orden o la gracia.
Humilla tu vanidad, humíllala te digo.
Descubre en la naturaleza tu lugar
en invención a escala o verdadero arte.
Humilla tu vanidad,
Paquin, ¡humíllala! El árbol sobrepasa tu elegancia.
Aduéñate de ti y otros también lo harán.
Humilla tu vanidad.
No eres más que un perro golpeado bajo el granizo,
sólo una urraca hinchada bajo el sol veleidoso,
medio negra, medio blanca,
y ni siquiera distingues el ala de la cola.
Humilla tu vanidad.
Mezquino es todo tu odio
nutrido por la falsedad.
Humilla tu vanidad,
ansioso en destruir, avaro en caridad.
Humilla tu vanidad,
te digo, humíllala.